El vidrio de los productos Flaska se programa utilizando el procedimiento TPS (Tecnología de Programación del Sílice). Con este tratamiento se consigue que la estructura vibracional del agua que ponemos dentro cambie y sea más similar a la del agua en el manantial.
El proceso consta de cuatro fases, cada una de las cuales incluye diferentes métodos de transmisión de información que contribuyen en su conjunto a la eficiencia de la tecnología Flaska.
El tratamiento vibracional al que se someten las botellas en nuestra central en Eslovenia, mediante el cual se programa el vidrio para que cambie la estructura del agua y la haga más parecida a la que podemos encontrar en el agua de manantial…